μετανοῖεν

Te he escuchado, hemos hablado por dias de ese malviviente que tenías a tu lado... lo siento se que esa frase es dura pero para mi nunca fue otra cosa, esa es la imagen que tengo de él, tal vez porque siempre me llamaste cuando el hizo que tu corazón se volviera pedazos, cuando llorabas de madrugada, cuando quisiste no existir, cuando deseaste que tu memoria se borrara y tu entendimiento se tornara gris ... como me dolía! como no sentir la rabia de saberte apaleado, irrespetado, vejado y, disculpa, hasta usado. Un pedazo de mi, ese que nunca dejará de amarte latía contigo, ese que yo evito y que tu esquivas, se sentía impotente y rabioso, al punto del pensamiento asesino de saberte irrespetado.

Se que he sido confidente, guardián de sueño, escape, depositario de dolores y no me arrepiento ya que te prometí que siempre estaría ahí para tí, y fiel a mi palabra de caballero ahí he estado, contigo, para ti, gracias a ti y a veces a pesar tuyo.

Pero esta vez ha sido diferente, esta larga agonía que en tu vida empezó hace 3 años y que hoy parece llegar a su fin nos infectó, digo nos porque lo que fuese creció en nuestro vínculo, al punto de hacerse un incubo perverso, feraz y metastásico que recorre ahora nuestro antiguo lazo. No creo ver salvación posible, en dos meses tu estarás en otro lugar y a menos que lo extirpemos, nos corroerá a los dos, por eso solo cuento los dias que aún me quedan para decirte que me quedo con tu recuerdo y que ese niño de mirada esquiva, manos suaves, voz indefinible, actuar taciturno y ternura infinita siempre tendrá hogar en mi corazón.

un gato pelambrudo