lunes, 3 de noviembre de 2014

Hay días en que simplemente ... no se.

domingo, 26 de octubre de 2014

Mi hijo


Ser padre... gay

Hace muchos años conocí a la madre de mi hijo, es una mujer sencilla, trabajadora, nacida en el campo en una de las regiones rurales de mi país. Con esfuerzos estudió, se tituló y se estableció como auxiliar administrativa de una comunidad religiosa; ahí conoció a Pablo, se enamoró, se embarazó y tuvo a Sebastián, mi hijo.

Martha y yo hemos sido amigos por 25 años, siempre que Sebastián le iba mal en el colegio, tenía un problema o simplemente necesitaba de una figura masculina ella me llamaba. Pablo... simplemente nunca estuvo; huyó cuando se enteró del embarazo de Martha y se ha ocultado desde entonces al punto de no tener bienes a su nombre por evadir a las autoridades que tienen un proceso por alimentos desde que el bebé nació. Sin embargo... doy gracias a Dios por este regalo, a Pablo por su descuido, a la vida por esta oportunidad, ya que me permitió estar a lado de ese maravilloso muchacho que es Sebastián. 

Recuerdo con cariño miles de momentos: él corriendo por nuestro lugar de trabajo desordenando todo muerto de la risa mientras la mitad de los empleados trataban infructuosamente de atraparlo, en un balneario cercano metiéndose a la piscina y de pasada empujando a todos sus primos, cantando en su cumpleaños, mirando juntos por la ventana mientras la lluvia caía. Luego ya un poco mas grande, cuando se refugió en mis brazos, triste y acongojado por tener que repetir un curso en el colegio o en la ocasión en que tuvimos la consabida charla de sexo para que el tuviera su primera vez con su chica.

Tanto mi amiga como Sebastián saben que soy gay; el día en que les conté solo recibí un largo abrazo de mi hijo y bueno... Martha tardó un poco mas en reaccionar, por alguna razón no se lo esperaba, pero ahora eso acá no importa, somos una familia... quizás no la mas tradicional pero somos una. Es la familia que Dios, la vida, el destino... me regaló.

En unos días Sebastián será un joven de 18 años que estudia en la universidad, que amo con el alma y que me cambia el día con tan solo dos palabras "Hola Pa!"


domingo, 14 de septiembre de 2014

Rinconcito de Poesía




SOLEDADES

MARIO BENEDETTI

Ellos tienen razón

esa felicidad
al menos con mayúscula
no existe
ah pero si existiera con minúscula
seria semejante a nuestra breve
presoledad



después de la alegría viene la soledad
después de la plenitud viene la soledad
después del amor viene la soledad



ya se que es una pobre deformación
pero lo cierto es que en ese durable minuto
uno se siente
solo en el mundo



sin asideros
sin pretextos
sin abrazos
sin rencores
sin las cosas que unen o separan
y en es sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo



los datos objetivos son como sigue



hay diez centímetros de silencio
entre tus manos y mis manos
una frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos



claro que la soledad no viene sola



si se mira por sobre el hombro mustio
de nuestras soledades
se vera un largo y compacto imposible
un sencillo respeto por terceros o cuartos
ese percance de ser buenagente



después de la alegría
después de la plenitud
después del amor
viene la soledad



conforme
pero
que vendrá después
de la soledad



a veces no me siento
tan solo
si imagino
mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad
y de la tuya
otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después
de la soledad.

La solitudine

Siempre he tenido amigos que son de otras partes del país, su visión distinta me enriquece, me brinda alegría y me permite comprender otros mundos pero nunca había logrado entender su sentimiento de desarraigo frente a la tierra de donde provienen ... hasta ahora. Vengo elaborando un duelo en marcha y otro por venir; en menos de un año de tener toda mi familia a mi lado seré el único en esta ciudad ancha y ajena. Mi padre, por cuestiones de salud se ha trasladado de manera permanente a la costa y si bien me alegro mucho porque su calidad de vida ha mejorado notablemente, me hace falta. El ha sido un apoyo incondicional, un padre extraordinario para un hijo gay, un cómplice irrestricto y sobre todo un hombre que ha sabido entenderme. Por otro lado mi hermano, mis sobrinos, mi cuñada y con ellos mi madre me comunicaron hace unos 20 dìas que se radicarán fuera del país en fecha próxima... Nunca antes me había sentido tan solo. Mi familia sabe de mi orientación y la acepta en mayor o menor grado pero mis sobrinos y mi madre son claves en mi vida, de alguna manera ese par de pequeños me habían permitido un poco vivir la experiencia de ser padre; por otro lado mi madre que es la única de mi familia que aún tiene conflictos con mi orientación sexual es un ser maravilloso que hace 36 años decidió echarse al hombro un hogar y hacer de sus hijos hombres de bien, ella con sus rigideces es también para mi un faro moral. Se que voy a estar bien, no es que seamos la familia de almuerzo comunitario cada ocho días, ausente de conflictos jejeje por el contrario ha habido ocasiones en que nuestro carácter nos ha distanciado por meses pero el amor permanece ahí. Ahora ya no estarán cerca... y yo solo sigo haciéndome un poco mas viejo, mas solo y mas cansado. Se que esto me está haciendo mella porque adicionalmente, hace mas de un año que no tengo una relación estable. Estoy cansado de que me inviten a una tarde de sexo fogoso pero no haya siquiera un abrazo post coito. No soy un santo, ni pretendo serlo. Solo soy un hombre gay promedio que sabe ser fiel con su pareja, que se equivoca, que tiene un físico agradable a la vista sin estar en gym, que tiene sentimientos profundos y una inmensa capacidad de trabajo y sacrificio combinada con un genio que puede ser de los mil demonios.



 

Por lo pronto... solo puedo decir lo que siento porque tengo el brazo cansado y las palabras bellas ya no salen con la misma fuerza.

lunes, 23 de junio de 2014

Nothing by now


Hoy solo me pregunto donde estás? Te he esperado con ansia, con desesperación, con paciencia, con resignación, con júbilo, con fervor, con alegría, con rudeza y malquerencia... pero siempre te he esperado.

Aún no logro entender porque es tan difícil ... camino entre muertos: zombies de corazón que deambulan habiendo perdido la esencia del amar, ciegos al cariño, torpes al deseo, rasgados en sus almas  y famélicos de afecto.


Cuando llegues, esto será para ti....




domingo, 6 de abril de 2014

TRILCE


Hace 10 años conocí a un hombre. Uno de los mejores; con buen corazón, con valores, con sueños, emprendedor, inteligente, atractivo.  Nos hicimos amigos, despacio, sin prisas, con mensajes, con caritas felices y eso no hizo mas que darme la dicha de estar mas cerca de su alma y hacer crecer mi admiración, respeto y ... amor por él.  Poco a poco, como el agua en los surcos, su presencia fue llenándome de esperanza en la vida, y comencé a abrigar la esperanza de que fuese él quien me acompañara, un trozo de la vida o quizás el resto de ella. Sin embargo, nuestros caminos parecían no tener asidero: si yo andaba en la ciudad, el estaba fuera, si yo viajaba a la suya,  el estaba en otra, si coincidíamos, teníamos poco tiempo... solo lo justo para pasar una tarde de sexo vigoroso... pero el sexo casual un bagazo triste para quien merece tu alma. Solo pasamos un par de noches juntos, cuando por causa de un Seminario se quedó en mi casa, en mi cuarto, en mi cama. Dormir abrazados, sintiendo la tibieza de su piel, verle respirar despacio, esperar para que la luz hiciera abrir sus ojos despacio y saborear su sonrisa al amanecer es un recuerdo grabado en mi memoria.  No tuvimos sexo; solo nos dimos un beso, largo, saboreado, húmedo, carnoso, deseado, porque él tenía pareja y fieles, no a él sino a los principios que nos habían unido por tanto tiempo, no queríamos romper aquello que admirábamos mutuamente.

Durante todos estos años, nuestras charlas telefónicas, nuestros saludos fugaces en mutuos viajes, nuestros mensajes en la red siempre terminaban con una mirada de esperanza y confianza en que algún día podríamos estar juntos.

Hace 3 meses, la felicidad se atravesó en nuestra espera. El tendría un contrato con la misma empresa con que yo trabajaba. Al menos por un tiempo, vendría para Bogotá. Miles de planes trazados, sueños acumulados, abrazos guardados y besos contenidos comenzaban a tomar forma y a aparecer, no como un anhelo sino como una esperanza.

Ha pasado un mes, que ha sido lleno de felicidad, como es obvio con disgustos y complejidades de dos personas que tratan de amoldarse. Pero cualquier problema, era secundario al verle sonreir en la mañana mientras compartíamos el desayuno, al cruzarse nuestras miradas cómplices en medio de los pasillos de la empresa o al encontrarnos cansados al final del día pero jubilosos de tener una noche para los dos en casa.

Sin embargo, siempre una sombra tenue se hallaba omnipresente, ahí acechante, cubriendo todo de con una bruma que no deja respirar, que oculta la luz y que esconde el peligro pero que se te cuela entre los dedos. El trataba de ocultar las cosas con sus dientes perfectos, sus ojos brillantes y sus tibias manos siempre dispuestas a un abrazo. 

... cambiaste, de un momento a otro; decidiste ser detestable, odioso, lejano y ... casi hasta parecer interesado pero lo que mas me dolió fue que rechazaras mi cariño, me evitaras abiertamente y mintieras sabiendo que me daba cuenta. No lograba comprender, hasta que esa tarde, a la luz de un sol moribunodo me lo dijiste. Tu examen salió positivo. 

Te conozco, se que te aislarás, por un buen tiempo.  No querrás estar con nadie porque no querrás hacerle daño a nadie, así sea de forma accidental y vas a huir de mi, precisamente porque ese beso en la terraza me reveló que mi esperanza no era infundada.

Te perdí... En la forma mas sublime en la que se puede perder a alguien ... por amor.  

domingo, 5 de enero de 2014

Un día cualquiera

Soy un hombre de 43 años intentando creer en el amor de pareja.  Hasta el momento lo he conocido ... de a pocos, por pedazos. Cuando inicié este camino nunca pensé que fuera tan complicado, tan difícil, tan árido y a veces... solo a veces tan descorazonador.  Pero por otro lado, tampoco imaginé todas las inmensas alegrías, los instantes que se eternizan en una mirada cruzada, en un beso, en una caricia o simplemente en una ilusión. Sin embargo esos han sido instantes, los unos y los otros y aún no encuentro lo que busco... no encuentro ese amor que sea eterno.

A veces me pregunto si soy yo el que falla, el inconstante, el impaciente, el infiel, el torpe... en fin el que se tira todo de un manotazo y bueno razones no faltan para pensar así pero se que en el fondo, muy en el fondo esa experiencia de amor pleno que he sentido en otros contextos no ha llegado, y no se trata de "no haber sabido construirla"... esa experiencia única e irrepetible y por eso tan maravillosa y plena simplemente se da, es lo mágico de ella, no es replicable, no es fabricable, no es construible; solo se da o no se da.

Quiero tener a mi lado esa alma gemela, ese otro cuyo brazo sea un tibio peso en mi costado, ese que hace que los días mas pesados desaparezcan con una mirada o con una sonrisa.  Un amigo me decía en estos días que no entendía esa ansia del mundo de andar acompañado, que el prefería estar solo. Lo entiendo. A veces yo también quisiera ser así pero no, yo soy el que soy, fui educado para estar en comunidad, para ser grupo, para construir vida en abundancia, para unirse ... si renuncio a eso renuncio a ser yo ... y ahí pierde sentido mi existencia.

Hasta el momento siempre he asumido cada relación como un aprendizaje, para "la siguiente" pero el tiempo pasa y la siguiente no es la definitiva. No pido que se me solucionen los problemas como por arte de magia o que me gane el baloto para tener mas cosas y quitarme unos años de apariencia a punta de cirugía. Por fortuna aprendí de mi abuelo que solo necesito mi inteligencia y dos manos para trabajar.

Solo quiero esa oportunidad, quiero poder reconocerla cuando llegue, tener la sabiduría de elegirla y tener la fuerza y la entereza de mantenerla.

En cuanto a quienes han sido mis parejas en el pasado... aún aquellos a quienes no confiaría ni mi sombra, les doy las gracias por haberme permitido compartir con ellos un trozo del camino y haber aprendido de sus vidas, de sus experiencias, de su forma de ver el mundo así fuera solo para repudiarla.

La noche comienza a llegar y aún no estás conmigo...



Y si al final del camino la vida no te encuentra triunfante, que por lo menos te encuentre luchando!