martes, 3 de agosto de 2010

Room mate! 3 Colofón







Por todo lo anterior y lo expuesto en post previos, considero que el mejor compañero de apto es el que saluda, se despide, mantiene su espacio en orden colabora con el aseo general y paga/cobra puntualmente y ya.

9 comentarios:

Monchis dijo...

Eso de la convivencia es todo un rollo bien complicado; sin embargo coincido contigo en que el orden y el respeto de los espacios es fundamental.

JP dijo...

Alguna vez la Tia Monchis me dijo que si lo iba a hacer y pdia hacer el esfuerzo comprara mi propio lugar de una vez.

Un año despues, le he recordado infinidad de veces en ese tema.

Geniales las imagenes... muy descriptivas jajajajja.

Joey dijo...

Creo que el room mate ideal es aquel con quien ya no convivimos. De mi parte he encontrado que el estado ideal es el que tengo actualmente, vivo solo pero muy cerca de mis allegados.

NewSaint73 dijo...

Siempre, Siempre, solo que mal acompañado, y si la compañia es mala, que uno sea el malo(jajaja)

Chau.

Belén Manrique Castaño dijo...

Hola ,gracias por tu visita y claro que puedes esa es la idea que sean aprovechadas al máximo y ojalá por muchos.
Aunque no te comentó te visitó a menudo

MR. BLISS (UNA LEYENDA URBANA DE POCA TRASCENDENCIA) dijo...

Yo si acaso me aguanto a mi mismo, por ende el roomate perfecto es el eco de mi voz, mi propio desorden, mis propias reglas y desfachatez...dicese...vivire solo un muy, pero muy buen tiempo

Jorge dijo...

jajajajajajajaja
demasiado cómica las imágenes
yo todavía no he vivido por mi cuenta
así que cuando lo haga te diré qué tal me fue
un abrazo gorila

Vicky dijo...

Respondiendo a tu comentario: gracias, creo que es todo lo que te puedo decir. Como dices tú, no tenemos certezas y la belleza reside en lo instantáneo. La espontaneidad de lo pasajero nos invita a ser memoria, a ser nuestra memoria y caminar sobre eternos vagones hacia el cielo. Las cometas aletean en pleno verano, invitándonos a ser un poco más presentes, dueños del movimiento del agua y del canto de los cisnes que aunque cortos y efímeros, se irán impregnados con nuestra mirada y nuestras emociones. Pequeñas riñas eléctricas nos decepcionan en la vida, llenándonos del smog del corazón pero siempre hay una luz, un pequeño hilo de oro que atraviesa las ventanas y nos dice: "sigue".

Hermosas palabras las tuyas. Por cierto, aprovecho este momento para decirte que leí uno de tus posts: "mi primera vez" y hasta el día de hoy no lo he dejado de pensar. Eres un gran escritor, aprovecho este comment para decírtelo.

Gaycidencias dijo...

Hola Quike:
Comento en esta entrada después de "devorar" los otros posts que saben cautivar la atención y son muy interesantes tanto en fondo como en forma. Gracias por pasar por mi pedacito de Caribe y comentar.

Cuando tuve la oportunidad de vivir fuera del país me tocó escoger roommate, y aunque ella lesbiana y yo gay, jamás tocamos el tema de la homosexualidad, pero sí tuvimos reglas muy tácitas que nos dejaron convivir bien: quien aseaba qué parte de la casa, qué cosas del mercado comprabámos en común (pollo, pastas, aceite de oliva, papel higiénico en cantidades industriales, etc). Nunca tuvimos ni un sí ni un no. Mientras los fines de semana yo me perdía, ella se quedaba en la casa o visitaba a sus amigas. Fue una experiencia buena, pero a esta edad, mi roommate es mi marido a quien amo full.

Un abrazo caribeño!

Fede!

Y si al final del camino la vida no te encuentra triunfante, que por lo menos te encuentre luchando!