domingo, 10 de agosto de 2008

Mi niño llegó sin buscarlo, sin pensarlo… al principio era un muchachito igual a cien mil muchachitos pero con su constancia, su generosidad de corazón, su transparencia, su sencillez y su capacidad para animarme aún en los momentos mas complicados se ganó un espacio que ni siquiera contemplé para él inicialmente. Que les puedo decir de él… no se, que doy gracias a Dios y a la vida por estos momentos. Solo quiero compartir con ustedes mis amigos estos pedacitos de nuestra alegría.

Frases que se han cruzado con nuestras miradas

“Estoy ansioso por verte triunfando en tu trabajo”.
“A tu lado me esfuerzo por ser mejor ser humano”.
“Te quiero mucho príncipe de mis sueños.”
“Amor, tus palabras me llegan al alma”.
“Ni la suerte, ni el destino, estamos juntos porque Dios así lo quiere”.
“Cuando estoy contigo, lo demás se reduce a simples eventos pasajeros”.
“Tienes un cuerpo joven pero eres un alma vieja, tu sabes porque estás acá”.
“Lo bonito de dormir es que dejo de pensar en ti para comenzar a soñar contigo”.

Soy plenamente consciente que es prematuro pensar en algo a largo plazo, pero por ahora simplemente deseo que Dios y la vida me den las fuerzas para ser digno de él.

1 comentario:

JP dijo...

No opino extensamente por que estoy con el corazón como...helado...

Pero sé lo que se siente y me alegro por que se que lo mereces.

Abrazos...

Y si al final del camino la vida no te encuentra triunfante, que por lo menos te encuentre luchando!