miércoles, 27 de mayo de 2015

MI EXPERIENCIA CON EL VIH.... parte 1



MI EXPERIENCIA CON EL VIH....



Un gatico amigo, tierno y retozón... me buscó dias atrás.  Quería compartir su experiencia con mas personas... una experiencia dura, difícil y que requiere honestidad y valentía.  Por ello hoy publico con orgullo la primera parte de un texto de ese entrañable amigo, un gato festivo.

La verdad fue algo que no me esperaba, tener una vida normal, tranquila y sin preocupaciones con un proyecto de vida y que en un solo instante con un dictamen se te acabe todas las ganas por seguir luchando... eso sentí al momento de enterarme que era portador de VIH.


Recuerdo que tenía 22 años de edad cuando me entere y tenia tantos propósitos por realizar y seguir con mi pareja actual, pero el saber el diagnostico fue lo que me mato en un solo instante la cabeza y empecé a caer en depresión, porque por mi falta de conocimiento en el tema pensé y afirme que era ya la hora de morir.

En ese aquel 14 de agosto de 2012  en que me senté con aquella chica que venía por alianza VIHDA la cual estaba esperándome y al momento de verla me saludo calurosamente y me dijo que nos  sentáramos en unas pequeñas sillas del fondo del anterior Centro Comunitario LGBT que quedaba en chapinero.  Al ya sentarnos ella me pregunta que como estaba? y le dije que algo mal porque hace unas semanas me habían hospitalizado porque había intentado quitarme la vida por un problema sentimental que había tenido, ella con una cara de susto me pregunta si ya estaba bien y yo le respondí que sí!!, que ya estaban la situación más controlada mas sin embargo ella me mira con cara de preocupación,  yo pensé que era por lo que le había dicho, pero bueno ella cambiando el tema aunque muy profesional ella me dijo que mientras estuviera bien eso era lo que realmente importaba.

Sin más preámbulos comenzamos a hablar del tema que nos interesaba a los dos y ella me hace la pregunta directamente... ¿tú que, como crees que te fue en la prueba? Y yo solo le respondo algo tímido... la verdad no se? creo que bien? (Si debo aceptarlo con algo de dudas pero estaba con la esperanza de que saliera todo bien), ella me dice que me relaje, que el resultado que salga debo tomarlo bien ya sea bueno o malo, que todo va a estar bien y que debía ser fuerte si llegaba a salir un diagnostico “reactivo”... sentí muchos nervios pero le dije que no se preocupara y que abriera el sobre. He ahí cuando ella abre el sobre y lee primero el resultado, yo me quedo mirándola esperando a que me diga cual era el resultado y de un momento a otro ella me mira y me dice, ¡POSITIVO!... Yo no lo creía aun, estaba en shock y por un momento me perdí entre mis pensamientos, pues se me paso un flashback de todas mis vivencias, ahí fue cuando se me aguaron los ojos y la verdad no supe que ni que decir, ni qué hacer... estaba contra la espada y la pared... Yo le decía, ¡eso no es verdad! Mientras mis lagrimas se abundaban en mis ojos; ella me dijo, si quieres verlo por ti mismo; es ahí cuando me pasa aquella hoja...  al yo verlas me suelto en llanto y me dice que me calme, que debo ser fuerte, que de eso nadie se muere y que la medicina estaba tan avanzada que ya no hay peligro de morir porque era una enfermedad crónica... Yo solo pensaba en ese momento ¡me tire mi vida¡, ¡me hicieron daño¡ y ¡no quiero vivir así¡ mis pensamientos unidos a mis lagrimas... Ella me entrega el resultado y me dice “se fuerte que todo va a estar bien, debes ir a tu servicio médico para hacerte los exámenes correspondientes porque debes comenzar rápido tu tratamiento”, ella se despide de mí, me da su número telefónico celular y se va.


Yo me quedo solo y pensativo preguntándome que debía hacer? y en ese momento lo primero que hice fue ir a contárselo a mi pareja de ese momento, la cual al enterarse le dio muy duro, ya que recién habíamos tenido una pelea y días antes de que me dieran de salida en el hospital nos habíamos reconciliado e inclusive yo iba con las expectativas de superarme y dar lo mejor de mí para que todo funcionara; El al saber lo sucedido no me dejo en ese momento solo y decidió apoyarme sin importar lo que sucediera así se le viniera los demás encima.


El me decía que no sabía qué era lo que hacía, pero que era tanto lo que me amaba, que él quería seguir luchando conmigo, los dos juntos, de la mano... Cosa que me pareció tierna y un acto de amor puro... Pero ahí comenzaría mi tortura en cuanto a la relación y el no poder estar bien con mi pareja, ya que él era menor de edad (tenía unos 16 años para ese entonces) y no quería hacerle un mal a futuro.Al comienzo de los días empecé a deprimirme, empezaba a verme al espejo y no entendía, ¿porque si estaba enfermo no lo aparentaba? y me empecé a lapidarme solo diciendo que me iba a morir y que debía ser así. 

Mas sin embargo mi pareja siempre me apoyaba y trataba de subirme la moral hablándome y diciéndome que no me rindiera y que diera todo de mí para que pudiéramos superar este problema y para no preocuparlo yo fingía que lo oía y le decía que tenía la razón, pero eso lo hacía solo para hacerle creer que yo si quería seguir viviendo, pero yo no lo hacía! porque solo tenía el tormento de pasar pena y vergüenza por esa situación. Más sin embargo yo lo amaba, así que  trataba de dibujar una sonrisa en mi rostro y decir que todo iba a estar bien.   Continuará....

1 comentario:

Vicky dijo...

Esto me hace recordar un cuento del libro "Al Diablo la Maldita Primavera", la historia se llama "El Amor en los Tiempos del Sida".

Y si al final del camino la vida no te encuentra triunfante, que por lo menos te encuentre luchando!