lunes, 5 de noviembre de 2012

Y ahora que....






Desde hace un tiempo ando entre niebla, camino la ritmo que la fe de encontrar luz me va marcando.  No puedo decir que tenga una vida difícil o con problemas, no. Por el contrario, he recibido regalos y milagros, el mas elocuente es que estoy vivo y sano, pudiendo estar enfermo.  Sin embargo todos los proyectos que antaño tenía en mi vida se ven retrasados, lentos, farragosos... como esas carretas de pueblo empantanadas en un lodazal que hace pesada la marcha y dudoso el destino.

Cuando no se puede avanzar lo único que queda es contemplar lo que se tiene al lado; sentarse a la vera del camino, aspirar el aire fresco, contemplar las flores de la vera y disfrutar el paisaje. Y ese paisaje tiene nombre: Camilo ha sido un viento fresco en mi vida, un hombre luchador, valiente, vencedor, con la mas grande generosidad de corazón que haya visto, con la ternura de un niño de 10, la intrepidez de  uno de 15, el cuerpo hermoso de uno de 25, la sensatez de uno de 40 y la sabiduría de uno de 60.  ¡Qué gran hombre ha llegado a mi lado! Y tal vez lo mas hermoso de él, es que en el devenir de sus tiempos y el altibajo de los míos, ambos aprendimos que nos amamos inmensamente... y por eso seremos los mejores amigos. 

Gracias Cami  por darle luz a mis dias, tibieza a mis noches, caricias a mis tristezas, eco a mis risas y latir a mi corazón.

Quike micifous.

1 comentario:

Vicky dijo...

Me alegra tanto oír que en el bosque hay claros donde el viento suave sopla.

Y si al final del camino la vida no te encuentra triunfante, que por lo menos te encuentre luchando!