sábado, 5 de noviembre de 2011

Pacem in terris

Un acto de fe, eso fuiste, un acto en el cual cerré los ojos y puse mi confianza en ti creyendo que tu harías lo mismo. Y bueno a decir verdad la fe parecía obrar milagros, los ciegos veían, los sordos escuchaban y por todas partes los frutos del amor parecían aflorar pero muy en el fondo sabía que eso no estaba bien.  Tus accesos de celos, tus ácidos comentarios y tu capacidad para inflingir dolor de la manera mas despiadada me iban mostrando que no eras cordero ni estabas cerca de serlo.  Al principio sentí rabia, luego ira, luego llanto y por último soledad y tristeza pero ahora que te miro dormir solo siento paz, justamente porque se que esta es tu última noche junto a mi.


3 comentarios:

Vicky dijo...

Decir adiós, es un acto de amor. No te enviaré abrazos, al contrario... Te envío un vaso de agua, para que tu alma sacie la sed.

Blackmount dijo...

quam homines universi cupidissime quovis tempore appetiverunt, condi confirmarique non posse constat, nisi ordine, quem Deus constituit, sancte servato

NewSaint73 dijo...

Animo gato, todo queda por hacer...por lo menos trata de divertirte...

Saludos

NS73

Y si al final del camino la vida no te encuentra triunfante, que por lo menos te encuentre luchando!